Los Cupcakes de hoy están pensados para los amantes de los Ferrero Rocher. De nuevo mi hija ha sacado la receta de su página favorita Objetivo: Cupcake Perfecto. La receta es una auténtica golosina. Por dentro un ferrero rocher fundido por el horneado y por fuera un ferrero rocher para adornar la ganaché. El resultado lo tenéis a la vista, una auténtica delicia. Pasamos a la receta. Espero que os guste.
Ingredientes:
Para el bizcocho:
100 gramos de aceite de oliva suave
2 huevos
120 gramos de azúcar moreno
115 gramos de nata
20 gramos de miel
120 gramos de harina
35 gramos de cacao en polvo sin azúcar
1 cucharadita de levadura química
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
40 gramos de avellanas tostadas y peladas
12 ferrero rocher
Para la crema de chocolate y avellanas:
200 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
200 gramos de azúcar glas
150 gramos de chocolate negro fundido y templado
2 puñado de avellanas trituradas y molidas hasta obtener una pasta
Instrucciones:
Comenzamos precalentando el horno a 180 grados. Trituramos las avellanas hasta obtener un polvo bien fino y reservamos. Mezclamos el aceite de oliva, los huevos, el azúcar moreno, la nata y la miel. Batimos hasta obtener una masa bien homogénea.
Mientras tanto cernimos la harina junto con la levadura, el bicarbonato sódico y el cacao amargo. Vamos añadiendo esta mezcla poco a poco hasta que quede una masa bien fina.
Colocamos la cápsulas de magdalenas en los moldes y ponemos una cucharadita de la mezcla, un ferrero rocher y después tapamos con otra cucharadita. Horneamoa unos 20-25 minutos hasta que queden bien cocidos. Si usamos una cuchara de helado sería media cucharada cada vez.
Preparamos la crema de chocolate y avellanas. Fundimos el chocolate negro al baño María y dejamos templar unos minutos. Mientras tanto mezclamos la mantequilla con el azúcar glas hasta obtener una mezcla bien fina, le vamos añadiendo poco a poco el chocolate fundido y al final las avellanas que hemos triturado hasta obtener una pasta líquida. Batimos al menos durante unos 5 minutos, para que nos queden picos suaves.
Adornamos los cupcakes con la crema y para finalizar ponemos un Ferrero Rocher por encima.
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