Volvemos con un postre sencillo, en esta ocasión una crema deliciosa y llena de sabor. El chocolate es un ingrediente que me gusta mucho, y en especial el chocolate blanco, el cual es mi perdición en los postres que aparece.
Hoy una sencilla crema de chocolate, con algo de nata, yema de huevo y un poco de vainilla para realzar el sabor. Este postre lo podemos preparar en un momento y estoy seguro que hará las delicias de mayores y niños.
Por supuesto es importante usar un chocolate blanco de calidad, si lo hacemos vamos a notar de forma clara el resultado final. También puede ser ideal para una fiesta con la familia o para alguna celebración especial en la que queramos hacer un postre diferente. Conozcamos esta deliciosa golosina, la crema de chocolate blanco.
Hoy una sencilla crema de chocolate, con algo de nata, yema de huevo y un poco de vainilla para realzar el sabor. Este postre lo podemos preparar en un momento y estoy seguro que hará las delicias de mayores y niños.
Por supuesto es importante usar un chocolate blanco de calidad, si lo hacemos vamos a notar de forma clara el resultado final. También puede ser ideal para una fiesta con la familia o para alguna celebración especial en la que queramos hacer un postre diferente. Conozcamos esta deliciosa golosina, la crema de chocolate blanco.
Ingredientes:
250 gramos de chocolate blanco
200 gramos de nata
4 yemas de huevo
50 gramos de leche
1 cucharadita de vainilla en pasta
Me puedes seguir en:
Elaboración:
Ponemos al fuego la nata, la leche y el chocolate blanco que hemos troceado. Lo hacemos a fuego suave y no dejamos de remover hasta que el chocolate se haya fundido totalmente.
Por otro lado, batimos las yemas. Las incorporamos a la mezcla anterior junto con la vainilla en pasta. A fuego suave no dejamos de remover hasta que se nos quede bien cremosa. Es importante procurar que no se nos pegue o queme.
Retiramos del fuego y vertemos en los recipientes de cristal que tengamos a mano. Introducimos en el frigorífico y dejamos unas cuatro horas antes de consumir.
Por otro lado, batimos las yemas. Las incorporamos a la mezcla anterior junto con la vainilla en pasta. A fuego suave no dejamos de remover hasta que se nos quede bien cremosa. Es importante procurar que no se nos pegue o queme.
Retiramos del fuego y vertemos en los recipientes de cristal que tengamos a mano. Introducimos en el frigorífico y dejamos unas cuatro horas antes de consumir.

menuda exquisitez!!! esta receta se la haré a mis hijos, el chocolate blanco es el que más les gusta
ResponderEliminarun postre bien rico ¡¡¡ me gusta la idea ,besotes
ResponderEliminarLa vainilla es obligatoria? No tengo
ResponderEliminarNo lleva azúcar? Que chocolate blanco se pone? De postres o tableta normal?
ResponderEliminarNo lleva azúcar y el chocolate el que tu quieras.
ResponderEliminar