Un desayuno que me lleva a mi niñez y sobre todo a mis tiempos de estudiante en la Universidad. En aquellos tiempos compartíamos piso unos amigos y todos podíamos estudiar gracias a las becas, así que un aspecto fundamental era el ahorrar y comer de forma barata y abundante, eramos jóvenes y la verdad es que comíamos como leones. Recuerdo que los lunes pagábamos todos 2.000 de las antiguas pesetas y con eso teníamos que comprar la comida de la semana. Los viernes era una locura, si te levantabas un poco tarde ya no pillabas pan para desayunar. Un desayuno habitual muchas mañanas eran las rebanás de pan fritas, con un poco de azúcar por encima o mojadas en un poco de agua y sal, era el desayuno perfecto acompañado normalmente de un buen vaso de leche.
Ingredientes:
Rebanadas de pan, normalmente del día anterior
Aceite
Azúcar
Agua con sal
Instrucciones:
Cortamos el pan en rebanadas con un grosor de 1 o 2 centímetros aproximadamente. Freímos en aceite hasta que queden bien doradas. Colocamos en papel absorbente para que pierdan el aceite sobrante.
Podemos espolvorear con azúcar o mojar un momento en agua con sal.
Che buone queste frittelle. Uno di quei dolci che profuma di tempi antichi. Buona giornata
ResponderEliminarUn espectáculo! En casa nos encanta aunque ya no las hacemos apenas ya que no quemamos tantas calorías como de jóvenes :)
ResponderEliminarPero que ricos son los picatostes, yo también los comía mucho de niña.
ResponderEliminarBss
Afri
¡Ay, me recuerda mi infancia y la de mis hijas! Yo también las tengo en mi blog dulce.
ResponderEliminarSaludos.
esto me recuerda a mis desayunos cuando iba a casa de mi abuela y de mi tia!!! y me encanta!!!
ResponderEliminarsaludos
Jose cuantos recuerdos, en casa las hacía mucho mi madre, a mi me gustaban tal como salían de la sartén, ni azúcar ni agua sal, a mi padre le encantaban pasadas por agua sal, mis hermanas y mi madre con azúcar, eso era el desayuno de muchos Domingos porque era el día que mi padre estaba en casa para poder desayunar con nosotras, yo se las había preparado a mis hijos también y aún ahora cuando hago alguna comida que le añado una rebanadita de pan frito siempre hago de mas, para mi menda y mi marido si le apetece que también le gusta y sino pá mí como la tía de Gila jaajajajajaajajaj, muy buenos recuerdos hoy Jose. Besosss.
ResponderEliminarFicaram uma maravilha ,já comia uma .
ResponderEliminarbjs
Hola Jose, pues me has llevado a mi niñez de cabeza, también desayunábamos muchos sábados estas rebanás, y qué ricas. Las mojadas en agua eran mis preferidas, pero yo después las pasaba por azúcar.
ResponderEliminarAños hace que no las tomo, habrá que ponerle remedio, aunque sea por lo menos una.
Besotes.
Así se las comía mi yaya
ResponderEliminarPues alucina, este desayuno aún hoy se lo hago a mi hija. Mi madre nos los hacía a mi y a mis hermanos, y yo ahora a ella. Y que rico que está asi el pan, calentito y mojado en un cacao o cafelin com leche. Nosotros los comíamos sin nada, simplemente el pan frito y hala...pa dentro. Lo de la sal si que no lo sabía yo, fijate.
ResponderEliminarbesines
Riquisimo!!!!!! ¿me querrás creer que mi marido hace dias que me lo está diciendo? Qué le haga pan frito como cuando era pequeño...con su azúcar por lo alto.
ResponderEliminarEn mi casa era pan "tostaito" al fuego directamente, untado con ajo y aceite....tengo que hacerlo y escribir sobre ello....
Feliz dia.
Ricas rica y matadoras al mismo tiempo, calorías mil! pero ricas ricas...
ResponderEliminarBesos
Me has recordado a mi época de estudiante, en la que los lunes comíamos de lujo y a medida que pasaba la semana la cosa iba bajando, je,je.. Estas rebanás las hacía mucho mi abuela. Me han apetecido de nuevo mucho. Un beso y gracias por recordármelas.
ResponderEliminarUn desayuno delicioso, acompañado de esos hermosos recuerdos aun mas, a veces lo mas sencillo y humilde es el mejor de los bocados. Mil besicos amigo
ResponderEliminarMe levas a mi infancia, mi padre nos las preparaba y como lo festejábamos.
ResponderEliminarGracias y un beso.
Que buenas!!! Pues lo de mojarlas en agua y sal no lo sabía,a mí como más me gustaban era mojadas en vino y azúcar...jajajaja ... ahora me explico que no haya crecido mucho
ResponderEliminarBesos
Mi madre nos las preparaba muchos domingos, con su capa generosa de azúcar por encima. Qué ricas nos sabian y ahora con tanta O.B. y tanto guardar la línea, las dejamos a un lado; una pena.
ResponderEliminarUn beso
Estupendas!! las cosas sencillas son las mas ricas
ResponderEliminarUn abrazo
Madre mía, ya no me acordaba de estas rebanás, con lo buenas que son, y lo poco que engordan,jajaja, será por eso... Me quedo por aquí, que me va la cocina light y se te da muy bien!
ResponderEliminarUn abrazo
¡Qué curioso!... El pan y aceite siempre ha dado mucho juego. Mejor esto que los cereales con tantos conservantes y colorantes que quieren colar a los niños.
ResponderEliminarsemplice e delizioso!!!
ResponderEliminarUn pain perdu à l'espagnole. Ça me plait.
ResponderEliminarA bientôt
une jolie recette bien appétissante à noter
ResponderEliminarbonne fin de journée
estas rebanas son un clasico. quedan buenas con todo en pures, spitas, guisos y hasta solas..estupendas jose! un beso
ResponderEliminarMi padre nos las hacía todos los domingos, nosotros con azúcar, vaya tiempos!
ResponderEliminarPues todo un clásico, aunque las hagas con pan de molde. Un besote.
ResponderEliminarfun and simple
ResponderEliminarA mi padre le encantaba y raro era el domingo que no me despertara el olor a pan frito en casa , que recuerdos!!!!!
ResponderEliminarMuy tierna tu entrada de hoy José Manuel. Ojalá no falten en ninguna casa unas buenas rebanadas de pan frito tan ricas con un vasito de leche...Ojalá!!!
ResponderEliminarDeliciosa y bonita entrada, que ricas!!!! Un BESO.
ResponderEliminarAy, esto se lo hacía mi abuela para desayunar, el pan frito, ¡y nos encantaba a todos!. Cuántos años hacía que no las veía, qué recuerdos.
ResponderEliminarUn besote.
Que recuerdos me ha traido tu receta, mi padre nos lo preparaba para merendar o para echarselo al puré de patatas, que bueno y cuanto tiempo sin probarlo, creo que has despertado algo en mi.
ResponderEliminarBesos
Miguel
lareposteriademiguel.com
No las he probado pero se ven riquísimas...qué recuerdos ¿verdad? besitosss
ResponderEliminara mi tambien me traen recuerdos me las hacia mi abuela, ahora las hace mi madre finitas para acompañar la sopa de ajo
ResponderEliminar¡¡besos¡¡
Mi abuela nos las hacia para acompañar el xocolate calentito ummm que ricura por dios.
ResponderEliminarBicos mil wapo.
Que ricas con azúcar y canela, si es que nos conformábamos con lo que había, ahora tienen la despensa y el frigo lleno y no saben que comer.
ResponderEliminarSaludos
A mi tambien me han recordado a mi niñez, mi madre las preparaba para el desayuno o para la merienda, ese día en casa estas rebanás eran una fiesta.
ResponderEliminarTe quedaron de lujo.
Un saludo.
Tu tarta de chocolate blanco te quedó genial, es la misma receta que yo tengo editada en mi blog. Pero de aspecto han quedado muy diferentes, sobre todo en la cobertura ¿No crees? Supongo que es porque yo he puesto para el ganache 250 de nata y tu has puesto menos cantidad.
ResponderEliminarEcha un vistazo aquí http://morenisa.blogspot.com.es/2012/07/tarta-de-chocolate-blanco.html
Un saludo.
Si, por lo que he visto es la misma receta. Yo la he sacado de un libro que me compré en un mercadillo que ponía Repostería de conventos y que está dividido en dos partes. Uno de respostería y otro se supone que de postres de conventos. en lo único que no coincide es en el ganache.
EliminarSaludos
Fíjate que una cosa tan sencilla te evoca mil recuerdos, es una pasada. Besos
ResponderEliminarQué recuerdos nos ha traido estas rebanás fritas, en casa siempre había los fines de semana, por entre medias no daba tiempo a freir tanta barras, porque teníamos que ir al cole. Un vaso de leche y a correr
ResponderEliminarHummm esas no las conocía yo... Las tengo que probar!!!
ResponderEliminarGRACIAS GUAPA :)))
Hola Jose Manuel, anda q no he comido yo rebanás de pequeña, mmmmm q ricas. Y desde luego q ese dia no me daba hambre en toda la mañana.
ResponderEliminarFelicidades por tu blog.
Un saludo
Agus
Que recuerdos Jose Manuel...yo también comía estas rebanadas de pan frito para sesayunar y nos sabian a gloria!!
ResponderEliminarBesos
Buonissimo e molto invitante!!!! Felice giornata
ResponderEliminarSe ve delicioso José Manuel, hay gente que me ha hablado de esta receta!!
ResponderEliminarYo creo que ha sido el desayuno de más de uno, sencillas y tradicionales y que saben a gloria.
ResponderEliminarBesos. Lola
Che bella idea !
ResponderEliminarciao
Muy ricas, claro que cuando uno es joven las puede comer sin remordimientos.
ResponderEliminarBesos.
Qué deliciaaa!!!! Nunca las he hecho porque creo que me comería muchas, pero un día de estos me doy ese regalo!!
ResponderEliminarUn beso...
También yo he recordado mi niñez al ver esta riquísima receta. Recuerdo a mi madre, cortando el pan del día anterior. Las mojaba en un poco de agua, las freía, espolvoreaba con azúcar, ¡¡y a mojar en el cola-cao!! Exactamente igual que nos comentas. Qué recuerdos!!
ResponderEliminarEn mi zona no son típicas estas rebanás de pan frito, pero además de sencillas me parecen riquisimas... se las paso a mi hijo que está en su primer año de carrera universitaria para que tome nota!! bessosss,
ResponderEliminarUy cuando mi madre hacía el ajillo era lo que más me gustaba, ir pellizcando estas rebanás de pan frito, qeu buenas.
ResponderEliminarBesazos.
this is quite basic and easy, but it'd make a tasty breakfast for sure!
ResponderEliminardeliziose queste frittelle!! ciao
ResponderEliminarLas suelo poner como guarnición cuando preparo los revueltos de setas con gambas. Pero que recuerdos más gratos, a mi también me las hacía mi madre.
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